IBM ha marcado un hito en la historia de la informática con la presentación de su IBM Quantum System Two, bautizado como el "ordenador cuántico más avanzado del mundo". Recientemente inaugurado en Donostia (San Sebastián), esta máquina no es solo una mejora de hardware, sino una revolución arquitectónica.
El sistema se basa en un diseño modular y escalable que permite integrar múltiples procesadores cuánticos en una única unidad compacta. Esta modularidad es la clave para superar las limitaciones físicas actuales, permitiendo al sistema crecer en capacidad sin perder eficiencia. En esencia, está diseñado para ser la plataforma que ejecute algoritmos cuánticos de gran escala, algo que hoy está "fuera del alcance de los sistemas clásicos tradicionales".
La columna vertebral del IBM Quantum System Two es el procesador IBM Quantum Heron, el más potente que IBM ha desarrollado hasta la fecha.
Este procesador, junto con una infraestructura y electrónica modular de alto nivel, confiere al sistema una potencia sin precedentes, capaz de ejecutar hasta 5.000 operaciones de puertas cuánticas.
El diseño del sistema destaca por su enfoque híbrido, que combina:
Además, el software es igual de crucial: el sistema está soportado por Qiskit, la plataforma avanzada de IBM que permite a investigadores crear, simular y ejecutar circuitos cuánticos, facilitando la explotación máxima de esta potencia.
El propósito del IBM Quantum System Two es servir como una herramienta para la innovación científica de vanguardia. Está pensado para investigadores académicos, laboratorios científicos y sectores industriales con grandes demandas de cálculo.
Sus aplicaciones más prometedoras ofrecen una ventaja inigualable sobre los métodos de simulación por fuerza bruta tradicionales:
El sistema abre "ventanas totalmente nuevas" para la resolución de desafíos que, hasta ahora, eran intratables.
La inauguración del IBM Quantum System Two en el País Vasco (España) tiene una profunda relevancia geopolítica. Donostia (San Sebastián) se convierte así en la sede europea de este sistema, integrándolo en el IBM-Euskadi Quantum Computational Center.
Esta instalación es estratégica para:
Al unirse a la red global de ordenadores cuánticos de IBM (que ya incluye sistemas en EE. UU., Alemania, Japón, Canadá y Corea del Sur), el País Vasco no solo se suma a la élite tecnológica, sino que consolida el compromiso de IBM de liderar la supercomputación centrada en la cuántica a escala mundial.
El lanzamiento del IBM Quantum System Two en Donostia no es solo una proeza de ingeniería, sino una declaración de la llegada de la era de la supercomputación híbrida. Al fusionar el poder de los qubits con la eficiencia de los procesadores clásicos de alto rendimiento (HPC), IBM está reconociendo que los problemas más complejos del mundo exigen la sinergia de ambas tecnologías. Este enfoque modular, respaldado por la comunidad de código abierto de Qiskit, asegura que el sistema pueda escalar no solo en potencia, sino en la diversidad y rapidez de sus aplicaciones, desde el diseño de nuevos fármacos hasta la optimización de procesos para la sostenibilidad. El verdadero hito es la capacidad de gestionar esta complejidad de forma cohesionada y eficiente para obtener resultados prácticos.
La elección del País Vasco como sede europea de esta máquina sitúa a la región y al continente en una posición de liderazgo estratégico en la carrera cuántica global. Más allá del prestigio, la instalación del IBM Quantum System Two representa una inversión fundamental en la soberanía tecnológica de Europa, impulsando la formación de talento especializado y la colaboración público-privada. Este centro se convierte en un imán para la investigación y la innovación industrial, asegurando que las empresas y laboratorios europeos estén preparados para aprovechar el inmenso potencial económico y científico que ofrece la computación cuántica. El futuro de la ciencia y la tecnología está indudablemente ligado a estos saltos cuánticos.
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